La oración trae sanidad cuando el cerebro se comunica con Dios, dice médico cristiano
21 Mayo 2014 | Noticias Cristianas Maranatha
Una encuesta reciente de
EE.UU., realizada por un médico especialista cristiano, señaló que la oración
tiene un efecto más positivo de lo que imaginamos, para demostrar que la fe que
transmite la oración puede ofrecer una cura para muchas dolencias físicas.
El director de investigación
del Instituto Thomas Jefferson Hospital and Medical College, el Dr.
Andrew Newber realizó el
estudio para llevar a cabo una resonancia magnética en el cerebro humano y ver
que hay poder en la oración o la meditación capaz de entrenar el cerebro para
funcionar bien, a partir de una relación con Dios.
“Hay varias partes del cerebro
que parecen estar implicados, y es realmente posible darse cuenta de que el
cerebro es fácilmente propicio para moldear este tipo de proceso”, dijo Newber
para explicar la capacidad del cerebro para comunicarse con Dios para una
mejora física.
Al realizar las pruebas fue
posible notar una gran diferencia entre el que ora y el que no lo hace.
El pastor Joel Osteen
defiende la tesis del investigador indicando que el beneficio que trae la
oración es algo “difícil de explicar”, y que él pide mucho más a través del
corazón, pero afirma que la fuerza viene de dentro, trayendo confianza y paz.
En otro estudio realizado
por Newber en 2012, explica que en la oración hay un aumento en la actividad de
los lóbulos frontales del cerebro responsable de la acción del área de
conversación, donde acontece una especie de proyección del pensamiento, como si
Dios me está hablando para que crea en él.
Durante el experimento, se
inyecta un colorante radioactivo inofensivo mientras se entra en profunda
oración, el colorante migra a diversas partes del cerebro donde el flujo de
sangre se hace más fuerte.
Lo más curioso es que el
estudio se llevó a cabo con varias personas, que independientemente de la
religión, lograron entrar en un proceso neurológico a partir de la oración.
“Esta experiencia es al menos neurológicamente real”, añade el investigador.
fuente: Mundo Cristiano.